En Honduras, con el aval del imperialismo, el empresariado, los militares y la cúpula de la Iglesia han dado un golpe hace casi cuatro meses. Aunque la represión ha sido muy fuerte, también ha sido impresionante la respuesta del pueblo hondureño: una amplia y heroica resistencia, donde las maestras que paralizaron las escuelas durante varias semanas, las mujeres campesinas e indígenas que participan de los cortes de carreteras, las jóvenes estudiantes y las activistas reunidas en "Feministas en Resistencia" jugaron un rol fundamental.

Lamentablemente, el golpe mostró también la impotencia y limitaciones de los gobiernos de Chávez, Correa y Evo Morales que aún cuando declaman contra esta embestida imperialista y de la burguesía hondureña, no apelaron a la movilización de los pueblos latinoamericanos, sino que aceptaron las prolongadas negociaciones impulsadas por el imperialismo, que sólo sirvieron para que se consolidaran los golpistas. Hoy, las negociaciones en marcha sólo intentan impedir que el régimen golpista caiga mediante la movilización obrera y popular, legitimando el régimen con elecciones fraudulentas.
Pan y Rosas se ha movilizado desde el primer día contra el golpe y ha manifestado su solidaridad con la resistencia, difundiendo las voces de las feministas, de las jóvenes estudiantes y de las maestras en lucha. Hoy planteamos: -¡No debemos confiar en la trampa del "Plan Arias", ni en las elecciones llamadas por los golpistas! Más que nunca es necesario dar un salto en la resistencia y organizar una huelga general para tirar abajo a Micheletti e imponer un gobierno provisional de las organizaciones obreras y populares que luchan contra el golpe, que convoque a una Asamblea Constituyente Revolucionaria, donde se discutan los grandes problemas de las masas trabajadoras y populares hondureñas. -¡Abajo los golpistas! -¡No a la negociación! -¡Viva la resistencia de las mujeres y de todo el pueblo hondureño! -¡Fuera las bases yanquis de Colombia y de toda América Latina!