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Más páginas y más ejemplares para que reserves el tuyo y otro más para tu compañera de trabajo, de la facu, del colegio, para la maestra de los chicos, para tu hija, tu mamá, tu amiga, tu novia, tu vecina…

En marzo de este año, presentamos en San Pablo (Brasil) la edición en portugués del libro "Pan y Rosas. Pertenencia de género y antagonismo de clase en el capitalismo", de Andrea D’Atri, publicado por Ediçoes Iskra. En la charla realizada en la PUC, participó Claudia Mazzei Nogueira que luego reseñó el libro para la prestigiosa revista Margem Esquerda.

En Argentina se practica medio millón de abortos cada año, casi la misma cantidad de nacimientos que ocurren en el mismo período. Esto solo basta para darse cuenta que es evidente que su prohibición no evita que las mujeres aborten cada vez que están frente a un embarazo no deseado.

Los explotados seguiremos siendo explotados, con empresas que lucran con la plusvalía de nuestra mano de obra. Yo soy ajera, yo corto y deschalo la mugre del ajo para que estos tipos se enriquezcan con mis manos encalladas... y no es por llorar miseria lo que digo, es porque así lo muestran los hechos.

En el marco del XXIII° ENM, nos reunimos 50 compañeras trabajadoras de la educación que viajamos con la delegación de Pan y Rosas a Neuquén. Había compañeras de Neuquén, Capital Federal, La Plata, Ensenada, Córdoba, Mendoza, Tucumán, Bahía Blanca, La Pampa, San Martín, José C. Paz, Pacheco/Tigre, Merlo, Matanza y Lomas.

Quiero decir que soy trabajadora de la educación, en vez de decir que soy docente… con todo lo que se vivió allá tiene un significado diferente, hoy soy trabajadora de la educación. Estoy muy agradecida de haber ido de la mano con Pan y Rosas. Aprendí que lo que se dice y lo que se hace van por el mismo camino.

En este Encuentro participamos, con Pan y Rosas, casi trescientas compañeras universitarias de Capital, Avellaneda, Quilmes, Lomas de Zamora, General Sarmiento, La Plata, Tucumán, Jujuy, Salta, Córdoba, Bahía Blanca, Mendoza, Rosario.

A tres días del juicio a los represores que actuaron en Neuquén durante la dictadura, mientras almorzábamos y cambiábamos experiencias en el monumento a San Martín, en pleno centro neuquino, comenzó a prepararse un acto militar, con los mismos que cargan sobre sus espaldas con la muerte de Teresa Rodríguez y Carlos Fuentealba.

Queremos dar las gracias a todas esas mujeres valientes que conocimos más de cerca en Neuquén durante el Encuentro, a esas mujeres que se juntaron, se organizaron y estuvieron al frente de muchos conflictos defendiendo lo que les parecía más que justo. Fue un honor para nosotras, esposas de trabajadores de FATE, estar con la Comisión de mujeres de Zanon, que nos transmitieron ese coraje que sale de adentro y contagia.