Hace más de un mes comenzó el juicio por el asesinato de Sandra Ayala Gamboa y este miércoles 24 se llevaron adelante los alegatos, definiendo el 2 de noviembre como el día de sentencia.

Sandra era una joven pobre e inmigrante peruana que en febrero de 2007 fue llevada engañada al ex Archivo del Ministerio de Economía (hoy ARBA) de la ciudad de La Plata para una supuesta entrevista laboral, allí fue violada y asesinada.

Durante esta larga jornada de alegatos, compañeros y compañeras de Pan y Rosas, del CeProDH y la Juventud del PTS de La Plata, Berisso y Ensenada acompañamos a Nelly, la mamá de Sandra como lo venimos haciendo desde casi 6 años en su lucha incansable.

Llegamos a esta instancia, en la que salió a la luz mucho de lo que se intentaba encubrir por parte del Gobierno y la justicia provincial, quienes no han avanzado en el esclarecimiento del FEMICIDIO de Sandra. Y aún hoy, no fueron condenados ninguno de los responsables materiales, intelectuales y políticos. A pesar de todas las pruebas, filmaciones y testimonios hay un solo imputado, Diego Cadícamo.

El Tribunal intentó durante el transcurso de las audiencias impedir la concurrencia del público, pero en esta ocasión pudimos entrar! ¿Qué buscaban? Que el juicio por la violación y femicidio de Sandra no sea público. ¿De qué tienen miedo? Temen que se destapen las redes de complicidad y encubrimiento que hay detrás de este crimen.

El caso de Sandra es un claro ejemplo de cómo el Estado encubre, reproduce y legitima la violencia hacia las mujeres. El crimen fue en un edificio estatal, ninguna cerradura fue forzada, la policía y la justicia tardó una semana en encontrar a Sandra cuando todos conocían cual había sido el lugar donde se la vio con vida por última vez, hay evidentes responsables políticos. La justicia mantiene completa impunidad. La sola presencia de Cadícamo en el banquillo no explica este crimen atroz.

Día a día, conocemos numerosos casos de femicidios, el último eslabón de una larga cadena de violencias. De eso sabemos las mujeres pobres, las trabajadoras, las inmigrantes que sufrimos la discriminación cotidianamente. Por eso, el próximo 2 de noviembre, día en que se conocerá el veredicto y la sentencia del juicio, llamamos a una gran movilización y radio abierta, porque la lucha continua.

Exigimos juicio y castigo a todos los responsables! Ganemos las calles unid@s con el grito “¡Todas somos Sandra!”

¡JUSTICIA PARA SANDRA Y PARA TODAS LAS MUJERES VÍCTIMAS DE VIOLENCIA!

¡BASTA DE VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES! ¡NI UN FEMICIDIO MáS!