Mediante un operativo policial de más de 500 efectivos, que incluyó Infantería, Caballería, la División de Motos, la Policía Científica, carros de asalto, helicópteros, bomberos, y hasta unidades especiales como la División de Sustancias Peligrosas y el Grupo Especial de Operaciones "Halcón", el Juez en lo penal Cesar Melazo, ordenó el desalojo de la textil Mafissa. Esta orden es contraria al dictamen del juez Rubén Arias, quien horas antes, había intimando a la empresa a cumplir la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo de la Provincia, reincorporando a todos los despedidos y suspendidos, el pago de los días caídos y poner en funcionamiento la Planta.

Desde las cinco de la tarde los trabajadores intentaron resistir la arremetida policial, luego se refugiaron en el último piso del edificio principal de la Planta, y durante horas se negaron a abandonarla. Junto a docentes, trabajadores y trabajadoras y distintas organizaciones políticas, de derechos humanos, centros de estudiantes, los obreros que no pudieron ingresar a la fábrica y las esposas de trabajadores de Mafissa permanecimos apoyando a los obreros.

Durante más de diez horas, alrededor de 300 personas, pusimos toda nuestra fuerza, cantamos y nos comunicamos con los trabajadores que permanecían adentro. No nos amedrentó la oscuridad cuando nos cortaban la luz de la calle; las luces de los celulares sirvieron para hacerles ver que seguíamos juntos. Trabajadores con mucha antigüedad en la fábrica, obreros que pedían "perdón" por no haber podido estar adentro, saludaban orgullosos y alentaban a sus compañeros. Las mujeres, firmes desde la primera línea, les recordaban que "cuando una mujer avanza ningún hombre retrocede".

Cerca de las tres de la madrugada, los trabajadores fueron detenidos, tanto ellos, como todos los presentes gritamos que la lucha continúa, porque -¡Mafissa es de los trabajadores, si a Curi no le gusta, se jode, se jode! El día de hoy, a primera hora de la mañana nos concentramos en la puerta de la Fiscalía donde un grupo de trabajadores declarará; mientras otro grupo aún se encuentra en la DDI.

Hoy, cuando se cumplen 19 meses de la desaparición de Julio Lopez, tenemos 17 compañeros presos por la misma impunidad. Los genocidas que denunció Julio Lopez, son los mismos que representa el empresario golpista Jorge Emilio Curi, amparado por la justicia y la policía, del "gobierno de los derechos humanos" de Kristina. Por eso la Comisión de Mujeres de Mafissa, Pan y Rosas y demás organizaciones sociales convocamos hoy a las 18hs en Plaza Moreno para participar de la marcha encabezada por los obreros de Mafissa y desde ahí proponemos dirigirnos todos hacia Tribunales de 7 e/ 56 y 57 exigiendo:

-¡Libertad a los 18 obreros de Mafissa, presos por luchar!

Retiro inmediato de la policía de la Fábrica

– ¡Reincorporación de todos los trabajadores despedidos y suspendidos!

– ¡Aparición con vida ya de Jorge Julio López!