El 29 de setiembre, en Córdoba, las mujeres de la agrupación Pan y Rosas -trabajadoras, estudiantes, artistas, trabajadoras de la salud y la educación- nos movilizamos junto a otras organizaciones, para mostrar en las calles que estamos decididas a organizarnos y a luchar para que no haya una sola muerte más por aborto clandestino. Se sumaron las y los compañeros de la runfla de tambores y del Colectivo Cultural quienes añadieron colorido a la marcha.
Denunciamos, a través de nuestros volantes, nuestros discursos y en los medios locales, la responsabilidad del gobierno, en complicidad con la Iglesia y la Justicia, por las muertes de 500 mujeres por año, solamente en nuestro país; y por la revictimización que significa, ni siquiera cumplir con una ley dictada hace casi 90 años, que no penaliza el aborto en algunos pocos y restrictivos casos.
Concluimos frente a la Catedral, custodiada por policías, al grito de "saquen sus rosarios de nuestros ovarios", donde leímos un documento común y una compañera leyó una adhesión del Colectivo Cultural.
Las mujeres de Pan y Rosas llamamos a poner en pie un gran movimiento por nuestros derechos: -¡Educación sexual para decidir, anticonceptivos gratuitos para no abortar y aborto libre, seguro y gratuito para no morir! |