Este año, se realizará en Neuquén el XXIII Encuentro Nacional de Mujeres. Ésta fue la decisión de miles de mujeres que, el año pasado, en Córdoba, aclamaron la ciudad de Neuquén como próxima sede por la valiente lucha de las trabajadoras docentes, para fortalecer el reclamo de juicio y castigo a los asesinos del docente Carlos Fuentealba y por la lucha de las obreras y obreros de Zanon en apoyo al reclamo de expropiación de la fábrica bajo control de sus trabajadores.

En Neuquén, las compañeras de Pan y Rosas (PTS e independientes) hemos venido participando de las reuniones para organizar el ENM. Reunión tras reunión debatimos con las militantes del PCR, Convergencia Socialista, PO y compañeras independientes para que la Comisión Organizadora no quede limitada sólo a la suma de nuestras fuerzas militantes, sino que sea un espacio que convoque ampliamente a más mujeres trabajadoras, desocupadas, estudiantes, feministas, lesbianas, etc., para que se transforme en una verdadera asamblea de trabajadoras, estudiantes, activistas, donde estén representados todos los sectores de mujeres que luego darán vida al Encuentro.

Tomar posición

Pan y Rosas también sostuvo, en diversas oportunidades, que en la Comisión Organizadora teníamos que debatir qué opinábamos y si podíamos pronunciarnos de manera común frente a distintos acontecimientos que se vienen sucediendo antes del Encuentro, siguiendo el ejemplo del 22-º Encuentro de Córdoba y otros anteriores en que las compañeras que integraban la Comisión Organizadora emitieron comunicados dando a luz su posición sobre diversos hechos.

Propusimos, concretamente, pronunciarnos en el 32-º aniversario del golpe militar genocida, que perpetró la desaparición de más de 30.000 personas, de las cuales el 30% eran mujeres, a muchas de las cuales les robaron sus bebés que aún viven bajo falsas identidades creadas por sus apropiadores. Antes de eso, el 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres, también propusimos que la Comisión Organizadora emitiera un comunicado denunciando la situación de opresión en la que vivimos las mujeres y convocando al próximo Encuentro de Neuquén. Insistimos, también, en que nos pronunciáramos repudiando el fallo de la Corte Suprema contra Romina Tejerina, que condenaba a la víctima al mismo tiempo que fallaba a favor de que el genocida Patti pudiera ser diputado.

Nada de esto pudo realizarse. Mientras todos los diarios, los grupos de activistas y hasta las mismas agrupaciones que estamos presentes en la Comisión Organizadora, nos pronunciamos, debatimos, marchamos y planteamos nuestra posición contra el golpe genocida y la impunidad, por la libertad de Romina Tejerina, por la despenalización del aborto y por los derechos de las mujeres trabajadoras, no pudimos hacerlo de manera común, lo que hubiera permitido que miles de luchadoras de todo el país, vieran que esta Comisión Organizadora las invita a venir con sus denuncias, sus anhelos, sus ganas de organizarse.

El color del dinero

Otro tema de debate en la Comisión Organizadora, surgió alrededor del financiamiento del Encuentro. Siempre se planteó que los ENM son y deben ser autofinanciados, para mantener su autonomía. Sin embargo, las compañeras del PCR propusieron, desde un comienzo, que había que pedir dinero al gobierno provincial, municipal y las cámaras empresariales. Pan y Rosas se opuso a esta propuesta, porque creemos que necesitamos un ENM donde miles de mujeres de todo el país nos podamos pronunciar libremente por el derecho al aborto, denunciar sin tapujos la explotación que sufrimos en las fábricas y empresas, escrachar a una justicia para ricos que condena a las mujeres, especialmente a las más pobres, mientras deja libres a los violadores, los proxenetas, los abusadores, organizarnos para luchar contra la impunidad del Estado y sus bandas mafiosas y miles de cosas más que enfrentan los intereses del régimen, del gobierno, de la jerarquía de la Iglesia y hasta los "opositores" de los partidos patronales.

Pero sabemos que es necesario contar con fondos para algunos gastos que debemos afrontar, por eso propusimos pedir aportes solidarios a los sindicatos y organizaciones de trabajadoras y trabajadores, organizar actividades para recaudar fondos como la venta de bonos contribución, festivales de música que podrían hacerse en Zanon (como se ha hecho por otros motivos, en innumerables ocasiones) y una campaña masiva de inscripciones adelantadas para llegar con algo de dinero al Encuentro.

Las compañeras obreras de Zanon también se opusieron a pedirle plata al gobierno y plantearon que llevarían este debate al conjunto de la fábrica que está bajo control de sus trabajadoras y trabajadores desde hace siete años. Y frente a las diferencias que se suscitaron, propusieron funcionar con el método de asamblea con el que, democráticamente, resuelven todas las cuestiones relativas a la producción y la actividad política de la fábrica: que se vote a favor o en contra, por mayoría y minoría. Las militantes del PCR dijeron que eso era imposible, porque rompía una larga tradición de funcionamiento por consenso que tenían los ENM.

Si bien, frente a la oposición de Pan y Rosas y las compañeras de Zanon, se acordó seguir buscando el aporte de financiamiento en Sindicatos, Colegios de profesionales y ONGs, la necesidad de un ENM autofinanciado e independiente de los gobiernos nacional, provincial y municipal, sigue siendo una discusión abierta en la comisión.

El "consenso" que termina en imposición

El funcionamiento por "consenso", es un tercer punto de debate. Nos parece que siempre hay que priorizar el debate, contrastar en profundidad las diversas posiciones, ideas, propuestas que traen distintas compañeras. -¿Pero cuándo no hay acuerdo absoluto? -¿Cuándo hay divergencias? -¿Cuándo las posiciones no pueden conciliarse porque son opuestas por el vértice? El PCR repite "consenso, consenso", como si fuera una fórmula mágica. Pero hay veces en que no se consensúa, porque consensuar significa ponerse de acuerdo libre y voluntariamente y, a veces, se tienen posiciones que no son conciliables. -¿Entonces, cómo se dirime el debate para no terminar en la parálisis?

Las compañeras de Pan y Rosas creemos que lo más democrático es saber cuántas compañeras apoyan una posición u otra o aportan una nueva solución, y que todas las mujeres que miran con expectativa la realización de este 23-º ENM, conozcan estos debates y sepan qué proponen los distintos sectores que hoy estamos asumiendo la organización del Encuentro. Nos parece que sería mucho más democrático que todas las compañeras conocieran las distintas posturas, aún cuando nos toque estar en minoría en muchas de nuestras propuestas.

No tenemos por qué ocultar las divergencias. Queremos que todas las mujeres que vendrán a Neuquén en el próximo mes de agosto sepan qué pensamos las mujeres que conformamos esta Comisión Organizadora sobre todos los temas que atañen a la organización del ENM como a las cuestiones que debemos enfrentar en la lucha por nuestros derechos. Y de esto hemos aprendido cuando, en el Encuentro de La Plata, algunas compañeras de agrupaciones feministas informaron que "a pesar de que ellas estuvieron en contra- otras mujeres de la Comisión Organizadora acordaron con el gobierno provincial de, en ese entonces, Carlos Ruckauf, quitar del temario del Encuentro el debate sobre el aborto.

-¿Qué Encuentro queremos?

El 23-º ENM se dará en el marco del primer año de gobierno de Cristina Fernández, bajo el cual empeoraron las condiciones de vida de las trabajadoras y mujeres de los sectores populares que debemos soportar la inflación que reduce el poder adquisitivo de nuestros salarios y hasta tuvimos que afrontar el desabastecimiento que provocaron los empresarios del campo. Mientras tanto, continúa siendo elevadísimo el número de mujeres que trabajamos "en negro": -¡54% sin cobertura médica, sin jubilación, sin vacaciones ni aguinaldo, con contratos basura y sin derecho a organizarse!

Pero cuando queremos levantar nuestra cabeza, ahí nos mandan la represión o las patotas de la burocracia sindical, como ha sucedido con las trabajadoras y trabajadores del Casino Flotante de Buenos Aires, las familias trabajadoras de la textil Mafissa en La Plata, de la autopartista Dana de la zona norte del Gran Buenos Aires,. como nos paso el año pasado con el fusilamiento de Carlos Fuentealba.

Si la violencia contra las mujeres es uno de los flagelos que recorre todos los tiempos y países, lo cierto es que en los últimos años ha aumentado enormemente, en Argentina, el secuestro, las torturas y la desaparición de mujeres para ser vendidas, explotadas sexualmente. Y no sólo eso, sino que el gobierno acaba de votar una ley sobre trata que fue rechazada por todas las organizaciones de mujeres, feministas y especialistas en ese tema porque obliga a las víctimas a tener que demostrar que no prestaron su consentimiento para ser explotadas sexualmente.

Por si fuera poco, mientras aumenta el porcentaje de personas que, en las encuestas, se manifiesta a favor de la despenalización del aborto, en nuestro país siguen muriendo más de 500 mujeres por año por las consecuencias del aborto clandestino que afecta, fundamentalmente, a las mujeres jóvenes, trabajadoras y de sectores populares. En eso coinciden el gobierno de Cristina, la oposición de Macri y Carrió y el mismísimo episcopado? que nos acusa a las que luchamos por este derecho de no defender la vida, mientras mantienen entre sus filas a curas genocidas como Von Wernich, encargados de confesar y sacar información a los detenidos-desaparecidos en los centros clandestinos de torturas de la dictadura militar.

Ni qué hablar de la justicia que, como ya señalamos, falla a favor de los torturadores como Patti, mientras condena a catorce años de prisión a Romina Tejerina.

Por esto Pan y Rosas de Neuquén está participando en la preparación de este Encuentro, con la convicción de que tiene que convertirse en un espacio democrático de debates y en un instrumento de lucha para miles de mujeres de todo el país, que nos permita unificar, fortalecer y ampliar nuestros reclamos para conquistar el derecho al aborto legal, seguro y gratuito, exigir -¡basta de violencia contra las mujeres!, pelear contra la impunidad, la precarización laboral y la carestía, por aumento de salario acorde a la canasta familiar, contra la desocupación.

Pan y Rosas le propone a las miles de mujeres que vengan al próximo Encuentro, que lo transformemos juntas en un encuentro de lucha, independiente del Estado, la Iglesia, los empresarios y los partidos patronales. Por eso convocamos a todas las compañeras que quieran construir un encuentro democrático, de coordinación y lucha, a participar de la Comisión Organizadora en Neuquén los sabados a las 15 hs en la Facultad de Humanidades.

Porque los derechos no se mendigan, se conquistan. No pedimos... -¡exigimos!, nuestro derecho al pan... pero también a las rosas.

Pan y Rosas- Neuquén

Próximas actividades en Neuquén

16/05 " 18 hs en la Facultad de Ciencias de la Educación- Cipolletti
Charla: "Los mitos sobre el Aborto"

23/05 " 18 hs en Casa Marx " Diagonal 9 de Julio n-º 38 " Neuquén
Charla- Taller: "Feminismo y Marxismo: Mas de 30 años de controversias"

25/05- 19 hs en Casa Marx " Diagonal 9 de Julio n-º 38 " Neuquén
Cine, Bar y Debate sobre la trata de mujeres: TRATA

Cada año, en el mundo, cuatro millones de mujeres y dos millones de niñas son vendidas para su prostitución, como esclavas o en supuestos "matrimonios", atravesando fronteras y llenando los bolsillos de los proxenetas con suculentas ganancias. -¡El tercer puesto en el ránking de negocios tan "productivos" como la venta de armas y el tráfico de drogas! Suficiente dinero para comprar el silencio "cuando no la complicidad y participación societaria- de jueces, policías, gobernadores y funcionarios. Un verdadero comercio con rostro de mujer "donde las más pobres y las migrantes son las más vulnerables- que exige que a las jóvenes secuestradas se les quite el documento, se les corte la comunicación con el mundo exterior y se las torture física y psicológicamente hasta que no les queden fuerzas para intentar escapar. Te invitamos a participar de este debate y a organizarnos para luchar contra este flagelo.