Durante la tarde del martes 20 de Mayo Alberto Barbieri -Rector de la UBA- mantuvo un encuentro con del Papa Francisco, donde acordaron la participación ni más ni menos que de la Iglesia Católica en el proyecto de la Universidad. La propuesta tiene como objetivo crear escuelas secundarias en algunas zonas de capital y el conurbano, intervención que será llevada a cabo por medio de los "curas villeros" que colaborarán en el proyecto, junto a la participación de otras “organizaciones sociales”.
A su vez, Barbieri se comprometió a que la UBA adherirá al programa Scholas Ocurrentes, cuya “filosofía” orienta el Papa.

No es de sorprender esta reunión, ya que hace poco al cumplirse un año del nombramiento de Bergoglio en el Vaticano, Barbieri se hizo presente en los festejos para homenajear al Papa, llevados adelante por la Universidad Católica Argentina (UCA). Sin embargo, resulta un lamentable salto en calidad en la avanzada reaccionaria que lleva adelante la nueva camarilla gobernante de la UBA ¿Cómo puede leerse sino como un atropello a la educación pública esta intromisión de la Iglesia Católica en nuestra universidad laica?

Barbieri pretende legitimar la intromisión de la Iglesia en la Educación Pública, avalando el cinismo de una institución que se jacta de velar por los derechos de los "desposeídos", mientras en el último documento de la Conferencia Episcopal se alinean con la campaña de la oposición patronal derechista que alienta el fantasma de la inseguridad para dar vía libre a la militarización de los barrios pobres, donde la maldita policía y las demás fuerzas como gendarmería y prefectura, aplican el gatillo fácil contra la juventud de esas barriadas, y son cómplices de las redes de trata y explotación de niños, niñas y adolescentes.

¿Con qué autoridad nos hablan de velar por el bienestar y la educación de los niños/as pobres aquellos que engrosan las filas de una institución sobre la que pesan 20 mil denuncias de abuso infantil? ¿Con qué cara pueden preocuparse por esos niños/as y jóvenes aquellos que son responsables de la maternidad infantil y adolescente no deseada, y las muertes por abortos clandestinos?

No nos podemos creer el verso de una presunta “vocación por los pobres” de aquellos que reciben un presupuesto de 40 millones de Euros, sin control fiscal en los palacios de oro del Vaticano y que en nuestro país sostienen su empresa con subsidios millonarios del presupuesto estatal. El relevamiento del sabido kirchnerista “critico” Verbitsky, dio a conocer en 2013 la cifra que recibe esta institución por parte de la Secretaría de Culto de la Nación: ¡32 millones de pesos!. Mientras tanto, en la “tierra”, obispos y miembros de la curia reciben cuantiosas cifras que se aproximan al “salario” de un juez federal de la nación, gracias a las leyes redactadas por el mismo Videla que los gobiernos K mantuvieron intactas.

Una nueva avanzada en la UBA: una Universidad clerical, anticientífica y al servicio del mercado

Después de 10 años de kirchnerismo, y cuando ya no le cabe duda ni al más despistado, que la tan renombrada "década ganada" no es nada más que un falso relato, Cristina dio vía libre al Papa Argentino para poner una traba más a la lucha por el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos. El año pasado le entregó un pase libre por la reforma del Código Civil en el cual se establece que la “vida comienza desde la concepción” (art. 19), algo en debate y no necesariamente plausible de comprobarse científicamente. Esta concesión a gusto del vaticano, significa un retroceso en los avances conquistados a través de la pelea que desde hace años las mujeres organizadas venimos dando, y no es nada más ni nada menos que una intromisión directa de la iglesia que pone una piedra más en el camino a la lucha por nuestro derecho a decidir.

En la UBA estamos presenciando una nueva avanzada de la gestión, donde el kirchnerismo junto a los radicales y el PRO, acuerdan todos juntos la designación de la máxima expresión de una educación mercantilizada como lo es Alberto Barbieri, primer enemigo de una Universidad al servicio de las necesidades trabajadoras. No sólo eso, sino que designan a Darío Richarte como vicerrector de la universidad, quién fue número 2 de la SIDE durante el gobierno de la Alianza y se encuentra imputado por los asesinatos del 19 y 20 de diciembre de 2001. No podía ser menos, cuando ya se demostró que las camarillas universitarias intentan una y otra vez colaborar con los grandes empresarios, como quedó demostrado en el acuerdo de colaboración con YPF-Vaca Muerta, para la explotación no convencional de petróleo, que da todo tipo de beneficio económica a la petrolera, y cuyo método (fracking), pone en riesgo de salud a los sectores populares que se encuentran en la zona. Junto a esto, denunciamos el ajuste que las camarillas, alineadas al proceso general que atraviesan los trabajadores, quieren imponer en nuestra facultad. Por eso, peleamos contra los despidos docentes que quieren llevar a cabo, la precarización laboral, los cientos de docentes ad-honorem y el ahogo presupuestario.

En vez de profundizar lazos con la retrograda Iglesia, alinearse con la Conferencia Episcopal y firmar convenios con empresas multimillonarias como YPF, nosotras peleamos por una Universidad opuesta por el vértice a este proyecto. Contra esta avanzada de la gestión nos organizarnos desde abajo, desde los Centros recuperados por la izquierda, en cada curso, para que este cuestionamiento se convierta en una fuerza de acción capaz de hacerles temblar su estructura de poder. Porque queremos una UBA que quiera trabajar en común con las organizaciones de mujeres independientes, con las organizaciones de trabajadores y de los sectores populares, para producir conocimiento al servicio de sus necesidades más sentidas.

¡NO A la Injerencia de la Iglesia en la UBA! Defendamos la Autonomía Universitaria!
Este nuevo giro, que Barbieri y sus secuaces quieren plantear como progresivo, no es más que un ataque a uno de los pilares fundamentales que desde la reforma universitaria de 1918 se logró conquistar. La violación a la autonomía universitaria, intenta vía este nuevo acuerdo unir de manera formal la Universidad a los intereses de la retrógrada, reaccionaria y asesina Iglesia. No hay forma que ante tal embestida, las estudiantes nos quedemos de brazos cruzados, mientras las camarillas buscan de cualquier modo poner a la Universidad al servicio de quiénes son cómplices y responsables de las dictaduras a lo largo y ancho de América Latina, que son responsables de las muertes y desapariciones de miles de mujeres en el mundo, que hoy junto a Cristina escriben con puño y letra el Código Civil y Comercial, que intenta profundizar el ataque a los derechos de las mujeres.

La autonomía universitaria, es un pilar básico para que la Universidad de Buenos Aires no se ate a las arbitrariedades e intereses de los gobiernos de turno, en función a la coyuntura política.

Si bien venimos denunciando que la cabeza de la UBA y las distintas facultades, buscan subsumir la Universidad a los intereses de las patronales, éste un ataque directo al movimiento estudiantil y docente que lucha y se organiza para que la Universidad pelee contra planes de estudios al servicio de las necesidades del mercado, contra la visión de una educación servicio y privatista, y para que los conocimientos estén al servicio de las necesidades y organización de los trabajadores y sectores populares. En este sentido, debemos organizarnos y pelear para que la Universidad sea realmente pública, laica, gratuita y de calidad y deje de ser una imposibilidad para las/os hijos de trabajadores.

¡Construyamos un gran movimiento de mujeres en las calles!
Desde Pan y Rosas creemos que no podemos dejar esta avanzada de la Iglesia Católica en la UBA, con la complicidad de Barbieri, y la alianza de los bloques del kirchnerismo, la UCR y el PRO.
Pero la pelea para frenar esta avanzada de la gestión y la iglesia sobre nuestra educación no puede ser en soledad. Por eso creemos que es necesario que entre todas (os) construyamos un centro de estudiantes que se ponga a la cabeza de la lucha por los derechos de las mujeres, para fortalecer y formar parte de un gran movimiento de mujeres organizado y luchando en las calles por conquistar nuestros derechos. No hay forma de impedir este intento de avance, sin un movimiento estudiantil que se organice junto a docentes y no docentes, movilizándose junto al resto de lxs trabajadores para que ganando las calles se escuche nuestra voz!

Por eso desde Pan y Rosas, para fortalecer esta lucha te proponemos:
- Rechacemos el convenio de colaboración de la UBA con el Vaticano, Ninguna injerencia de la Iglesia Católica en la UBA!

- Sumate a la campaña que impulsamos en las facultades contra toda criminalización de la protesta, NO a las "leyes antipiquetes", fuera los servicios de inteligencia de la UBA!