En la gran campaña militante que llevamos adelante desde la Bordó en el frente Naranja-Bordó despertamos simpatía y apoyo en trabajadoras del gremio. Cayeron bien nuestras propuestas y nuestra lucha por terminar con la discriminación que las patronales y la Verde hacen entre trabajadores varones y mujeres, efectivos y contratados, por terminar con la precarización, por que todas las mujeres tengamos las categorías que nos corresponden, por terminar con los acosos y la violencia por parte de jefes, y por que haya guarderías en todas las fábricas. Demandas por las cuales ya hay compañeras que vienen peleando, como las obreras de WorldColor. Son muchas las compañeras que apoyaron nuestra lista repartiendo nuestro boletín, participando del festival en Pacheco, fiscalizando. Ellas son parte activa e insustituible en la lucha contra las patronales y la burocracia.
Está lleno de mujeres que trabajan en talleres doce horas, sin franco, a destajo, en condiciones horribles y expuestas al maltrato patronal. Mujeres con sueldos bajísimos, sin las categorías que nos corresponden. Trabajadoras que son mamás y que si sus chicos se enferman les descuentan el día y pierden premios y adicionales, además de muchísimas que no tienen guardería en el trabajo y tampoco se les paga el equivalente para mandar a sus hijos a una guardería. Mujeres que somos discriminadas, acosadas y maltratadas por nuestros jefes POR SER MUJERES. POR SER MUJERES Y OBRERAS.
Mi puesto de congresal que conquistamos con el Frente está al servicio para que se escuche la voz de todas las que no tienen voz. Llamo a todas las compañeras a organizarnos para cambiar nuestras condiciones de trabajo y de vida, contra la opresión en el trabajo, el hogar y en la sociedad. Para enfrentar a las patronales y dirigentes vendidos.
A seguir el ejemplo de las obreras de WorldColor que se pusieron de pie junto a sus compañeros para conquistar sus derechos, y de la Comisión de mujeres de Donnelley que pelean codo a codo con sus esposos, y que fueron vanguardia en esta campaña. |