El pasado 7 de julio realizamos una concentración y corte de calle en frente de la Fiscalía de la ciudad de La Plata con el fin de pedir justicia por Antonela, una joven de 18 años, que fue violada por dos policías en Arana. El hecho ocurrió cuando camino a la escuela, la pararon y obligaron a subir a un móvil policial con el pretexto de que prestara declaración como testigo de un accidente.

En el corte en apoyo y solidaridad a Antonela participaron familiares, amigos, compañeros del colegio y los trabajadores de Astillero Río Santiago, donde trabajan su papá y su abuelo. Desde la agrupación Pan y Rosas nos hicimos presentes con una importante delegación.

Con mucha fortaleza, Antonela afirmó ante los diferentes medios que se hicieron presentes que va a seguir adelante y no va a parar hasta que se esclarezcan los hechos y se haga justicia, ya que aún no hay detenidos.

Este caso expresa una vez más el rol que juega la policía como brazo represivo del Estado golpeando duro a las y los jóvenes y el pueblo pobre. Los policías que violaron a Antonela, pertenecen a la misma institución que hoy cuenta con más de 9000 efectivos en ejercicio que cumplieron funciones durante la última dictadura genocida; que hace unas semanas abusaron de una chica transexual en la comisaría 4ta de Villa Arguello de Berisso; que cotidianamente somete a vejámenes y revictimización constante a las mujeres que van denunciar casos de violencia; que está involucrada en las redes de trata y prostitución y que es autora de múltiples casos de gatillo fácil.

Desde Pan y Rosas planteamos que la única salida para lograr justicia para Antonela es la movilización en las calles y la organización en forma independiente junto a las y los estudiantes, los trabajadores, y las organizaciones de mujeres.

¡Castigo y cárcel a los violadores!

Desmantelamiento del aparato represivo

Basta de violencia contra las mujeres

¡Justicia para Antonela!