El día de lucha contra la violencia hacia las mujeres se vivió de manera especial en Tegucigalpa, bajo el régimen golpista de Micheletti y a pocos días de realizarse las elecciones fraudulentas convocadas por el régimen, pero repudiadas por la resistencia.
La conmemoración comenzó con una conferencia de prensa de la plataforma de DDHH, que incluye a diversos organismos de la región, la que se declaró en emergencia de cara al proceso electoral y denunció la represión sistemática generalizada, selectiva y el incremento de las violaciones a los DD.HH. que ocurre a diario. Denunciaron también el aumento de las órdenes de allanamiento, principalmente contra integrantes del magisterio, y también las capturas y detenciones ilegales por parte de la policía y el ejército, contra personas que luego se encuentran asesinadas y con signos de tortura.
Gilda Rivera, del Centro de Derechos de Mujeres, cerró la conferencia convocando a las mujeres allí presentes a marchar hasta la Plaza de la Merced, donde se encuentra la sede parlamentaria, para conmemorar el Día de lucha contra la violencia hacia las mujeres, bajo la consigna que ya hicieron mundialmente conocida las Feministas en Resistencia: “¡Ni golpe de Estado, ni golpe a las mujeres!”
Un centenar de mujeres, entonces, marchó desde la sede de la conferencia de prensa, por las calles céntricas de Tegucigalpa coreando consignas contra el régimen golpista y a favor de la asamblea constituyente, mientras recibían el apoyo de vecinas, comerciantes y transeúntes que las acompañaban con aplausos, saludos y bocinazos. Adelay Carías, del Centro de Derechos de Mujeres (CDM) nos comentó sobre el informe que presentaron las Feministas en Resistencia, acerca de las violaciones de los derechos humanos de las mujeres, perpetradas por las fuerzas represivas del régimen. Ellas denuncian que muchas mujeres, durante las detenciones, han sufrido abusos y violaciones sexuales. “En la confusión, me perdí del grupo… Sólo yo me quedé en la paila de la patrulla. No sé qué rumbo tomaron. (…). Me violaron cuatro policías, luego me ultrajaron, me violaron con la cosa negra que le pegan la policía.”, dice una de las mujeres que testimonió sobre la represión en la manifestación de Choloma del 14 de agosto. Una maestra de El Durazno denunció: “Me escupían, me tiraban tierra y piedras con los zapatos, me golpearon con el tolete en los brazos y cuerpo. Me caí en una cuneta de tanto golpe, y me fracturaron el pie izquierdo. Mientras me golpeaban, me gritaban: ‘Hija de puta, te vamos a dejar lisiada para que nos dejés de joder.’”
Por su parte, Jessica Isla, feminista independiente, envió un saludo solidario para las trabajadoras de Kraft-Terrabusi de Argentina que siguen reclamando la reincorporación de sus compañeros despedidos y para las trabajadoras del Sindicato Mexicano de Electricistas que iniciaron, recientemente, una huelga de hambre en lucha por la reincorporación de los más de cuarenta mil trabajadores y trabajadoras despedidos.
Cuando sólo faltan cuatro días para las elecciones convocadas por el régimen golpista bajo el auspicio del imperialismo norteamericano, las feministas siguen en resistencia, denunciando los crímenes cometidos por la dictadura. Junto a ellas, en toda Latinoamérica, las mujeres que luchamos para que caigan los golpistas y denunciamos las negociaciones que culminaron con el fortalecimiento del régimen de Micheletti, decimos: ¡Wendy Carolina, presente! ¡Todas y todos los luchadores asesinados, presentes, ahora y siempre! ¡Abajo el golpe! ¡No a las elecciones! Por la huelga general indefinida hasta que caigan los golpistas. Que las organizaciones obreras, campesinas y populares de la resistencia convoquen a una asamblea constituyente revolucionaria para refundar el país en base a las necesidades de las mayorías explotadas y oprimidas del pueblo hondureño. |