Nuevamente nos encontramos frente a un caso que "sacude" a la sociedad, ahora en la localidad de Paso de los Libres (Corrientes). Esta vez una joven de sólo 17 años es la protagonista, como siempre de una familia pobre.
Este nuevo caso, que nos recuerda al de Romina Tejerina (Jujuy) y Elizabeth Díaz (Córdoba), demuestra nuevamente los padecimientos de las mujeres pobres en esta sociedad de explotación y opresión hacia a las mujeres. La joven correntina había ocultado su embarazo, y al momento del parto lo tuvo en su casa y sin asistencia médica. El Director del Hospital que la asistió dijo que es el tercer caso "de este tipo" que trató y afirmó que la psicosis puerperal puede durar hasta 40 días después del alumbramiento.
Otra vez una joven sufre la violencia que este sistema y sus instituciones nos imponen. El Estado no garantiza la educación sexual científica en las escuelas, ni los métodos anticonceptivos accesibles y gratuitos. Esta situación empuja a miles de mujeres, la mayoría pobres, a sufrir embarazos no deseados. Todo esto sumado a la ilegalidad del aborto afecta fuerte y directamente a los sectores más pobres que no pueden acceder a un aborto en condiciones seguras, con el resultado de 400 muertes anuales por aborto clandestino en Argentina. Esta realidad es la que la llevó a la joven correntina ocultar su embarazo y llevarlo adelante a pesar de no desearlo.
En Argentina existen 900.000 madres adolescentes, la mayoría son de hogares pobres. Sólo 1 de cada 3 adolescentes conoce métodos anticonceptivos seguros y los utiliza. 1 de cada 3 muertes de adolescentes se debe a las consecuencias de abortos clandestinos. La mayoría de las veces, los embarazos son resultado de la violación o el abuso.
Para las jóvenes y adolescentes, en este sistema capitalista no hay derecho a la educación, ni al trabajo, ni a la salud, ni a la diversión, ni a una sexualidad libre y sin culpas, ni a nada...
La iglesia también es cómplice de esta situación como lo demuestran las reaccionarias declaraciones del vocero Aguer que acusó a los contenidos del manual de formadores en educación sexual de "neomarxista" y promotor de la homosexualidad. Claro es entonces que la Iglesia no se cansa de imponer sobre los millones de jóvenes y niñ@s su visión retrógrada acerca de lo que es "normal", diciendo defender "la vida" mientras cientos de mujeres pobres y jóvenes mueren por abortos clandestinos. Y mientras "continúa con el debate", el no uso de métodos anticonceptivos causa miles de muertes diarias por la transmisión del SIDA. La iglesia sigue encubriendo a los curas y obispos abusadores, como Grassi. Esta es la misma institución de manera conjunta con el ejército y los grandes empresarios llama al golpe de estado en Honduras que reprime a miles de mujeres, trabajadores y jóvenes.
Con el gobierno de una presidenta mujer, el Estado y la Justicia se encargan de que nuestros derechos sean continuamente atacados.
Dejan a la mujeres en manos de las fuerzas policiales quienes revictimizan y cuestionan a las mujeres que se atreven a denunciar un abuso o violación. O como la Justicia que hace días redujo la sentencia a un femicida sólo por su "fuerte raigambre machista" y "la intolerancia a cualquier manifestación de independencia que asomara en su esposa".
Nuestras vidas y nuestros derechos no tienen ningún valor para el estado capitalista, ni para los políticos patronales de este régimen de democracia sólo para ricos, ni para los curas...
Las mujeres de las familias trabajadoras, estudiantes, jóvenes y pobres debemos levantar nuestras voces e independientemente del gobierno de turno, el Estado y los partidos de los sectores patronales, debemos y exigir al gobierno:
– ¡Basta de culpabilizar a las mujeres victimas de violencia! -¡Libertad a Romina Tejerina y a todas las Rominas!
– ¡Por el derecho a una educación sexual libre y sin tabúes en las escuelas en todos los niveles de enseñanza! -¡Por el derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo! Acceso libre y gratuito a todos los métodos anticonceptivos. -¡Por el derecho al aborto legal, libre y seguro para no morir!
Por la separación de la iglesia del estado |