Monseñor Aguer, arzobispo de La Plata y presidente de la comisión Episcopal de Educación Católica Argentina, insiste en cuestionar el manual de formadores en educación sexual por inculcar en niños y adolescentes el derecho al sexo como un derecho humano, porque no haría referencia al "amor, la responsabilidad, el matrimonio y familia como proyecto de vida", que "promueve la homosexualidad" y que ofrece una visión "neomarxista".
No es la primera vez que el arzobispo sale a realizar una dura cruzada contra la educación sexual en las escuelas y denuncia "contenidos marxistas" en la educación pública. También lo hizo algunos meses atrás cuando describió a la materia escolar "construcción de ciudadanía" incluida en la nueva Ley de Educación provincial, como "neomarxista" y "gramsciana".
-¿La vida de quién defienden?
Las nuevas declaraciones de Aguer, que la iglesia rápidamente salió a respaldar- lejos de sorprendernos, se ajustan milimétricamente a lo que esta institución reaccionaria ha venido proclamando desde hace siglos: oscurantismo, un curioso "derecho a la vida" que se traduce en más de 400 mujeres muertas por abortos inseguros; oposición a los anticonceptivos, y a la educación sexual mientras sigue encubriendo a los curas y obispos abusadores, como Grassi. O defendiendo al cura genocida Von Wernich, responsable de la desaparición de compañeros y compañeras en la Dictadura y cientos de niños/niñas y jóvenes que no conocen su verdadera identidad.
A dios orando...y con el mazo dando...
Aguer y sus secuaces son los verdaderos herederos de la Inquisición, fueron cómplices de la dictadura militar que tiene a 30.000 desaparecidos en la Argentina y que hoy impulsa el sangriento golpe de Estado en Honduras, que ya se cobró varias vidas (entre ellas dos maestros), heridos, torturados y salvajes ataques a las mujeres.
Mientras Aguer cuestiona la educación pública, en las escuelas religiosas adoctrinan, gracias a los millones de pesos en subvenciones que otorga el gobierno; recortan contenidos e imponen censuras. El avance de este oscurantismo logró que en Salta esté legalizada la educación religiosa en la escuela pública, y en Mendoza quitaron de los manuales de educación sexual temas como "el mito de la primera vez" y "la masturbación" porque "incomodaban a la iglesia".
En realidad esta campaña de Aguer y la Iglesia va dirigida no contra el manual del gobierno, sino en contra de la libertad de las mujeres a decidir sobre su cuerpo. Esto encierra detrás un modelo de familia en el que la mujer se reserva únicamente para la reproducción y las labores del hogar.
Y mientras Aguer "continúa con el debate", el no uso de métodos anticonceptivos causa miles de muertes diarias por la transmisión del SIDA. En Argentina más de 3 mil niñas de entre 10 y 14 años se convierten cada año en madres y el aborto clandestino pasó a ser la principal causa de muerte de mujeres gestantes y de más de 600 mil hospitalizaciones anuales. Una "inseguridad" que podría evitarse con educación sexual laica y científica en todos los niveles y sin injerencia de la Iglesia; con anticonceptivos gratuitos en todos los hospitales y centros de salud y con servicios de aborto legal, seguro, libre y gratuito en todos los hospitales públicos. La Iglesia, con su hipocresía criminal, viene por más y el Estado sigue avalando esta injerencia y así la deja avanzar sobre derechos democráticos elementales.
– ¡Enfrentemos a la Iglesia y su reaccionaria campaña!
– ¡Por el derecho a una educación sexual libre, científica y sin tabúes en las escuelas en todos los niveles de enseñanza!
– ¡Por el derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo!
Acceso libre y gratuito a todos los métodos anticonceptivos, por el derecho al aborto legal, libre y seguro para no morir
Necesitamos luchar por defender la educación pública y por arrancar el control ideológico del estado y las iglesias.
Basta de subsidios a la educación privada.
Por la separación de la iglesia del estado
– ¡Por la defensa de la escuela pública, gratuita, laica y científica!
Corriente Nacional 9 de Abril y docentes de Pan y Rosas |