Domingo 4 de noviembre de 2012

También es violencia...

EN ARGENTINA, 1 MUJER ES ASESINADA CADA 30 HORAS

Los femicidios son cometidos por hombres que, en la gran mayoría de los casos son parejas o ex parejas de la víctima, a la que consideran un “objeto” de su propiedad, hasta el punto de sentirse “dueños” de su vida.

Para luchar contra el ataque de la patronal de Donnelley (ex Atlántida) se puso de pie la Comisión de Mujeres. Los gráficos, unidos a nosotras, sus esposas, luchamos codo a codo con otros trabajadores en una dura pelea que impidió los despidos y nos dio mucha fuerza y una gran moral para seguir organizadas. Convencidas de que somos nosotras, junto a ellos, las que tenemos que luchar por nuestros derechos y porque la lucha contra el machismo esta a la orden del día, la Comisión Interna que dirige la agrupación Bordó, en acuerdo con nosotras, publicó una declaración exigiendo justicia por el triple femicidio de Benavídez, un caso que conmocionó a los trabajadores porque el responsable de ese aberrante hecho era un ex obrero de la fábrica. Allí, dejaron sentado que el machismo no es natural ni mucho menos heredado. Es muy alentador lo que dicen: “Desde la CI de Donnelley queremos aportar a la organización de las mujeres, de nuestras esposas, de las trabajadoras gráficas y de toda la clase trabajadora para pelear contra la violencia hacia las mujeres.” Éste es un gran ejemplo a seguir , que muestra que es posible luchar en común y dar batallas en el gremio, en el hogar y en todos los lugares con el objetivo de exterminar el veneno del machismo, que esta sociedad nos instila y que las mujeres pagamos con nuestras vidas. ¡Estamos orgullosas de levantar junto a ellos esta bandera! Y es la moral que nos mueve para luchar por ser miles en las calles dispuestas a plantar bandera por nuestros derechos. Así fuimos al Encuentro Nacional de Mujeres, a plantear la necesidad de que nos organicemos en Comisiones de Mujeres para luchar contra todo tipo de violencia.


CADA 5 MINUTOS NACE UN BEBÉ DE MADRES MENORES DE 19 AÑOS

Más de 100 mil adolescentes son madres, anualmente, en Argentina. Más de un tercio de las muertes maternas adolescentes son resultado directo de un aborto inseguro. Sólo 1 de cada 5 adolescentes conoce la existencia de la ley de educación sexual.

En las elecciones del Centro de Estudiantes de Sociales (UBA), Pan y Rosas instaló urnas violetas para que se expresaran centenares de estudiantes que apoyan la legalización del aborto. ¡Más de 1300 dejaron su voto! Este plebiscito lo repetimos en otras facultades de la UBA y en las elecciones de las universidades de Bahía Blanca, Córdoba, Lanús, La Plata y otras. Pan y Rosas impulsó la campaña “Sacáte una foto por el derecho a decidir” que se multiplicó en las redes sociales. Además, este año, desde la Secretaría de la Mujer de Psicología (UBA), impulsamos una jornada cultural por los derechos de las personas LGTB, con la artista trans Susy Shock, exigiendo la aprobación de la ley de identidad de género y participamos en las Marchas del Orgullo. Peleamos por la educación sexual en todos los niveles de la enseñanza; por la provisión de métodos anticonceptivos gratuitos y por el derecho al aborto libre, seguro y gratuito realizado en los hospitales públicos.


MáS DE 600 MUJERES ESTáN DESAPARECIDAS, SECUESTRADAS POR REDES DE TRATA Y PROSTITUCIÓN

El 72% de los casos de secuestros y desapariciones por redes de trata, son mujeres que están esclavizadas en “locales nocturnos”habilitados por los municipios. El 77% de las personas que son víctimas de estas redes, son mujeres; el 4%, transexuales y el 19%, varones. En el 70% de los casos, se engañó a las mujeres con “promesas de trabajo”.

En Mendoza, las jóvenes de Pan y Rosas y las docentes de la agrupación Marrón del SUTE, seguimos con la campaña por la aparición de Johana Chacón y Soledad Olivera, ambas adolescentes desaparecidas en la misma localidad de Lavalle. Toda la comunidad educativa de la Escuela Virgen del Rosario, donde estudiaba Johana, de apenas 13 años, está tomando esta denuncia y movilizándose. ¡Necesitamos extender esta campaña en todas las escuelas y facultades!


MáS DEL 40% DE LAS MUJERES QUE TRABAJAN ESTáN PRECARIZADAS

Las mujeres ingresan al mercado laboral en las peores condiciones de precarización. Además, hay discriminación ocupacional, siendo mayoría en los sectores de servicios (el 98% en el trabajo doméstico, 76% en la educación, casi 70% en el sector salud). En el país, hay más de 1 millón 200 mil trabajadoras domésticas, de las cuales un 83% no está registrada formalmente.

La precarización laboral que el kirchnerismo mantuvo todos estos años, siguiendo con lo impuesto por el menemismo, implica condiciones ilegales, salarios por debajo de la canasta familiar y riesgos de accidentes y muerte en el trabajo. Las jóvenes estudiantes de Pan y Rosas, con mujeres inmigrantes, trabajadoras precarizadas, empleadas domésticas y de talleres textiles clandestinos, seguimos impulsando la campaña contra la precarización laboral En la industria textil, los derechos de las mujeres no están de moda. En Neuquén, junto a la banca obrera del Frente de Izquierda, colaboramos con la Asociación de Empleadas Domésticas, presentando un proyecto de ley por sus derechos laborales. Luchamos por la unidad de las filas de la clase trabajadora, para exigir ¡Basta de precarización! A igual trabajo, igual salario. Por plenos derechos sindicales. ¡Plenos derechos sociales y políticos para las y los inmigrantes!


LAS TRABAJADORAS COBRAN SALARIOS UN 30% MáS BAJOS QUE LOS SALARIOS DE LOS TRABAJADORES

El trabajo es el lugar donde más se discrimina a la mujer. Las mujeres tienen una escasa inserción en la industria donde se encuentran los trabajos mejor calificados y remunerados. Y las que logran insertarse en ese sector, sólo consiguen puestos de baja calificación, en una situación de desventaja con respecto a los varones en materia salarial y de condiciones laborales.

Por Catalina Balaguer, delegada de la Comisión Interna de PepsiCo

En PepsiCo, con la organización y la lucha, junto a los delegados y delegadas de la Bordó, las trabajadoras obtuvimos una conquista: las que tienen más de tres años de antigüedad, pasaron de ser “operarias calificadas” a “medio oficial”. Es un cambio de categoría inédito en toda la industria alimenticia, negado por las patronales y por la burocracia sindical de Daer, enrolado en la CGT oficialista. Muchas compañeras de PepsiCo, Kraft-Terrabusi, Stani, FelFort y otras fábricas de la alimentación nos estamos organizando en comisiones de mujeres, que impulsamos las delegadas y delegados combativos, las comisiones internas antiburocráticas, la agrupación Bordó y Pan y Rosas, para pelear por categorías para todas y acabar con la discriminación en la industria. Por jardines de infancia gratuitos en todas las fábricas, empresas y establecimientos. ¡Por todos los derechos de las mujeres trabajadoras!


1 DE CADA 3 HOGARES SON SOSTENIDOS POR UNA MUJER

Más de 4 millones de mujeres son sostén de hogar en Argentina. La mayoría tiene entre 45 y 59 años y 7 de cada 10 no tienen pareja. La cifra creció 49% respecto al Censo de 2001. Uno de los principales problemas es la falta de vivienda.

“Peleamos por una vivienda digna. Somos gente trabajadora, yo soy obrera de temporada con 4 hijos y la mayoría no tiene un margen ni recibos de sueldo para comprar un terreno”, dice Ariela. Mercedes nos cuenta su historia. “Yo estaba viviendo en el parque, y a la noche dormíamos en una carpa, de esas que usa la gente para ir de vacaciones. Así vivimos durante 10 años, con tres chicos, usando los baños públicos”. Son las mujeres del asentamiento del Ingenio San Juan, en Tucumán, donde en una hectárea de barrio privado viven 5 familias y, en el mismo espacio de un barrio humilde conviven 50. Jesica dice: “Tenemos una comisión de mujeres que organiza todo. Las mujeres somos muy fuertes y estamos muy decididas a pelear por nosotras y el futuro de nuestros hijos. Sabemos lo que queremos y por lo que luchamos”. Ella encabezó la columna de Pan y Rosas en la marcha del XXVII Encuentro Nacional de Mujeres, en Posadas. Llevaba su bandera Dulces como el azúcar, resistentes como las cañas. Junto a las jóvenes tucumanas, también marchó Segundina, del Ingenio La Esperanza, de Jujuy, que viajó para contar que las mujeres estaban firmes en la lucha junto a sus compañeros, defendiendo los puestos de trabajo. “El ingenio no necesita de Roggio ni de ningún patrón, ya que los trabajadores son los que están todos los días trabajando de sol a sol y saben hacerlo funcionar”. Tucumanas y jujeñas, hermanas inmigrantes bolivianas se presentaron así: “¡Ni sumisas, ni calladas, mujeres del Noroeste, organizadas!”


HASTA UN 50% DE LAS TRABAJADORAS HAN SIDO OBJETO DE DIVERSOS GRADOS DE ACOSO SEXUAL EN SU VIDA LABORAL

Por acoso sexual en el medio laboral se entiende la práctica reiterada de diversas conductas de connotación sexual (desde chistes a chantajes, asalto y “tocamientos”) por parte de una persona (en especial, un “superior jerárquico”) hacia otra que no lo desea. Las mujeres son el 98% de las víctimas.

Por Lorena Gentile, delegada de la Comisión Interna de Kraft

Algo cambió en Kraft desde aquel paro histórico contra el hostigamiento de un superior a una compañera. En ese momento, la patronal, como era de esperar, decidió creerle al jefe y sancionarla a ella, con tres días de suspensión. El sindicato de Daer, como siempre, la “asesoró” diciendo que se vaya tranquila a su casa, que ellos lo solucionaban. Pero con la Comisión Interna, que enfrenta a la burocracia del sindicato, exigimos que se levante la sanción, que se tome su denuncia y que se actúe al respecto. A las 4 a.m. la producción de toda la planta estaba cortada; el turno mañana permaneció en estado de alerta esperando la resolución. Finalmente, la compañera volvió a trabajar: así como la patronal tomó partido por el superior acosador, las trabajadoras y trabajadores tomamos partido por nuestra compañera.
Y esa contundente respuesta de las trabajadoras y trabajadores fue un antes y un después. Las mujeres salimos fortalecidas de esta experiencia de lucha inédita en la industria. Hoy estamos más fuertes para no permitir nunca más ningún atropello y luchar por todos nuestros derechos. Lanzamos una campaña para acabar con la discriminación, exigiendo categorías para las compañeras y, por primera vez, empezamos a hacer asambleas de mujeres dentro de la fábrica. También nos organizamos para viajar a los Encuentros Nacionales de Mujeres. Nos llena de orgullo retomar las mejores tradiciones del movimiento obrero.




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